sábado, 4 de julio de 2009

Manual del pelotudo


Parte uno: El pelotudo recuperable

*Uno se manda una cagada.
Lo más probable, es que, como uno es re naive, re inocente, re pobrecito, re bueno (y todos los re justificativos habidos y por haber); decía: lo más probable es que uno no sea plenamente consciente de que se mandó esa cagada. Pero... si hubo un tercero afectado, si alguien se sintió mal como consecuencia de esa pelotudez que uno hizo, ese alguien se va a encargar de hacernos saber; tarde o temprano, bien o mal, con o sin diplomacia, pero uno lo va a saber.

*Uno se da cuenta que se mandó esa cagada.
Nos dijeron; a los gritos o con tranquilidad, por mail, teléfono, sms, por el msn... Como fuere. Es momento entonces de realizar un profundo análisis (mentira) para determinar si esa persona afectada nos importa o no. Si la respuesta a este análisis es negativa, los pasos siguientes son innecesarios.

*Uno se da cuenta que se mandó una cagada que hizo sentir mal a alguien que nos importa.
En el supuesto caso que uno sienta aprecio, respeto o algo por ese individuo que fue dañado por nuestra pelotudez; o porque simplemente uno tenga la característica de ser un culposo del orto... El paso siguiente es meditar acerca del error, asumirlo, darse cuenta que el hecho de que una persona determinada se encuentre experimentando una sensación poco agradable, es responsabilidad nuestra.

*Uno asume que se mandó esa cagada.
Aquí viene la mejor parte: uno tiene que HACERSE CARGO, aceptar, asumir que el error fue nuestro, que hicimos algo de lo que estamos arrepentidos. Aceptar que uno actuó como un pelotudo atómico y por esa razón, una persona que apreciamos se sintió herida.

*Uno se arrepiente y no quiere volver a mandarse esa cagada
Luego uno está en condiciones entonces de tomar todas las medidas necesarias para asegurarse de no volver a cometer ese error. Claro que, debido a que somos seres humanos uno se va a seguir mandando cagadas (aunque algunos están más expuestos a esto que otros, como lo demuestra la experiencia), pero bueno... la cuestión es que las próximas equivocaciones difieran de la actual.

*Uno intenta reparar de alguna manera el daño que hizo
Luego de cumplidos todos los pasos anteriores uno ya puede decir: "disculpame".
Recién entonces una disculpa tiene sentido.
Sólo en ese momento vale de algo la intención REAL de enmendar lo que está hecho.

Parte dos: El pelotudo alegre, el irremediable

*Si uno dice (omitiendo todos los puntos de la parte uno del manual) "disculpá pero la verdad no sé por qué te pido disculpas"

NO VALE UNA MIERDA, LAS DISCULPAS IMPORTAN UN CARAJO, Y UNO SE LAS PUEDE PERDER BIEN PERDIDAS EN EL ORTO.

Se entendió?

Ven? Aquí se aprende de todo.



(La redundancia y los errores gramaticales de este post son intencionales)